Cacería Arturo Imaz Baume

Cacería Arturo Imaz Baume


Ficha Técnica
Autor(es): Arturo Imaz Baume
Editorial: Arturo Imaz Baume
ISBN:
Año Publicación: 1938

$6000.00

Disponibilidad: En Stock

Fabricante:Varias Editoriales

"La caza fue el primer ejercicio del hombre en la lucha constante por la vida, y seguramente que en muchas ocasiones, dados los pobrísimos elementos de que disponía, debe haber sostenido cruentos combates en que se jugaba la existencia. Los animales han sido dotados por la naturaleza con recursos para el ataque y la defensa, y el hombre, como no dispone ni de la ligereza del ciervo ni de las garras de las fieras, tuvo que apurar sus facultades para apoderarse de ellos y obtener con sus despojos el alimento y el abrigo que necesitaba para subsistir.

Tal vez lo primero de que se valió fueron palos y piedras, al ver que sus toscas manazas, velludas y hercúleas, no le eran suficientes para matar a animales. Un palo puntiagudo, manejado por sus fuertes brazos, le daba ya alguna ventaja y constituía una arma. Una piedra aguzada y amarrada a otro palo, era una hacha. Después de coger a los animales por sorpresa, debe haber ideado trampas que le ayudaran al éxito, y más tarde armas arrojadizas. Al arma blanca se cazó durante siglos. La pólvora vino a abrir una etapa de exterminio en los animales que todavía no termina ni tiene traza de acabar.

Por otra parte, el reino animal comprende a muchos animales carniceros que instintivamente buscan, acechan y capturan a sus víctimas, aguijoneados por el hambre, empleando recursos propios con los cuales las dominan y sacrifican. Todos son depredadores."

La agachona

Un remojón inoportuno

Salvajismo yaqui

Los patos

Un acto de justicia

La codorniz

Muchas veces sale la codorniz justo a los pies del cazador

El compañerismo

Las gangas

La liebre

Presos por sospechosos

Palomo

Estrategia atorada

Los dedos de los principiantes

El doblete con los Varela

El jabalí

Tres problemas de caza

Como se caza en Tamaulipas a bordo de automóviles

Los caimanes

Una lampareada en Cuestecitas Tamaulipas

Mea Culpa

Un tigre que no se presenta

Se acabaron los venados

1 Volumen

Formato 19 x 24 cm

605 páginas con ilustraciones a blanco y negro

Ilustrada con ciento treinta y tres fotografías y sesenta y dos dibujos del autor

Miembro del consejo consultivo de caza y pesca deportivas

Encuadernación en Pasta dura tipo española

Edición 1938

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